El ministro de Economía y candidato presidencial de Unión por la Patria (UxP), Sergio Massa, anticipó anoche que a fines de noviembre el FMI comenzará “la investigación sobre la fuga de capitales del préstamo de 2018” tomado por el gobierno de Mauricio Macri, que “no se usó para escuelas sino para financiar pagos a fondos de inversión”.
Así lo anunció Massa en una entrevista para LN+, donde indicó que “a fin de mes el FMI empieza la investigación sobre la fuga de capitales sobre el acuerdo stand by de 2018″ y reveló que el organismo mandará “una comisión a la Argentina que va a hacer una revisión sobre el 66% que, según la AGN (Auditoría General de la Nación), no se usó para financiar hospitales, escuelas ni para resolver la estabilidad económica, sino para financiar el pago a fondos de inversión”.
Lo que aseguró la AGN
Los representantes del kirchnerismo en la Auditoria General de la Nación (AGN) aprobaron en mayo un duro informe que denuncia irregularidades en los “procedimientos administrativos” seguidos por la gestión Cambiemos para conseguir el acuerdo con el organismo internacional de crédito, en junio de 2018.
Encabezados por el auditor Javier Fernández, y con los votos de los representantes del kirchnerismo Juan Forlón, Graciela de la Rosa y Gabriel Miura Estrada, los auditores del oficialismo calificaron de “desastre” el acuerdo del gobierno de Macri con el FMI y enfatizaron las “violaciones a la normativa” que, según sus argumentos, se cometieron al suscribir el acuerdo. Afirmaron que el stand by no pasó por el Congreso ni salió vía decreto; que el entonces ministro de Economía, Nicolás Dujovne, no estaba habilitado para la operación, y que no se consultaron distintas reparticiones públicas antes de firmar el préstamo, que finalmente fue de US$45.000 millones.
Los auditores de la oposición, Miguel Ángel Pichetto, Alejandro Nieva y Jesús Rodríguez (presidente de la AGN), expresaron su rechazo al dictamen, rebatieron los argumentos y afirmaron que se trató de un acuerdo “necesario” dada la escasez de crédito privado que amenazaba, por aquellos días, a la gestión de Macri.
Además este domingo, el ministro recordó que en “diciembre del 2022, el Fondo Monetario Internacional quiso que paremos el gasoducto (Néstor Kirchner) y le dijimos que no”.
“El documento de 2022 del FMI decía que deje de gastar en obra pública y lo rechazamos porque dentro de eso estaba la inversión en el gasoducto, que se financió con parte del impuesto país”, subrayó.
También señaló que para el año que viene “prevemos crecimiento del agro y sector energético y minero” y eso “va a ser un gran consolidador de la cuenta general de Argentina”.

Respecto a la propuesta de eliminación de subsidios del candidato de La Libertad Avanza, Javier Milei, defendió que los transportes públicos muestren el precio del boleto si no estuvieran en parte financiados por el Estado: “Decirle a la gente cuánto van a costar el tren, colectivo y la nafta si se saca el subsidio es decirles la verdad”.
“Si queremos recuperar ingreso en la Argentina, tenemos que gradualmente ir reduciendo subsidios pero por otro lado mirando que aquellos que lo necesitan, lo tengan, porque el desafío es construir un país de desarrollo con inclusión, no un país para 4 millones de personas. Porque la lógica de ‘liberemos todo’, hay 4 millones que quedan adentro y 41 millones que quedan afuera. Yo quiero un país con 45 millones adentro”, marcó.
Además, afirmó que “no va a haber una devaluación después del balotaje porque hay establecido un acuerdo con el FMI que prevé que el 15 de noviembre empieza el crawl”.
“Los argentinos merecen saber si vamos a vivir en un país donde se venden o no los órganos, donde la educación es pública, gratuita y de calidad o es paga, y merecen saber si van a tener una megadevaluación el 10 de diciembre o no”, aseveró el ministro al criticar las propuestas de su contrincante en el balotaje el 19 de noviembre.
Al respecto, señaló que “está instalado” que Milei va a ser “un títere de (el exmandatario Mauricio) Macri” y subrayó que Unión por la Patria no tiene ese problema: “El presidente voy a ser yo”.