El escándalo que detonó por el desvío de dinero público por parte de un funcionario del gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela, parece no tener fin y la preocupación llegó al Comité Nacional del radicalismo, que emitió un duro comunicado titulado «La Rioja a un paso del autoritarismo sin escalas» en el que expresa su «preocupación por la situación que atraviesa la provincia, en particular el caso del diputado provincial de nuestro partido, Gustavo Galván, al que se le pretende realizar un juicio político por el simple hecho de ejercer su derecho constitucional de manifestarse».

El legislador Galván fue uno de los que se ocupó de denunciar los audios del jefe de Gabinete de Quintela, Juan Luna Corzo, en los que se destapó el desvío de fondos de pauta publicitaria oficial, situación que Quintela adjudicó a «una conversación entre amigos».

El comunicado de la UCR menciona que Galván participó de la «legítima manifestación realizada por ciudadanos y comerciantes riojanos, en protesta por las excesivas medidas de restricción implementadas que destruyen la economía de miles de familias» y advierte que «la respuesta del Ejecutivo provincial es intentar destituir a nuestro diputado por el simple hecho de manifestarse».

«Son bien conocidos los antecedentes de abusos de poder con la excusa de la pandemia, como lo vemos en Formosa. Ahora el gobernador Quintela parece emular a su par Insfrán y ejercer el poder con una clara tendencia autoritaria mediante el miedo y el amedrentamiento», pone de relieve la UCR.

«Desde el radicalismo nacional reclamamos al gobernador que cese en el intento de acallar a la UCR con excusas infundadas y el armado de causas absurdas. Al diputado Galván lo eligieron sus coprovincianos para representar uno de los valores más importantes y que hoy le están faltando a La Rioja: la libertad», finaliza la declaración, firmada por Alfredo Cornejo como presidente y Alejandra Lordén como vice.