La transición entre el gobernador entrante, el intendente de Río Grande, Gustavo Melella (Forja) y la saliente Rosara Bertone (PJ) resultó la peor de todas, ya que el contacto entre ambos funcionarios ha sido nulo, pese a que las elecciones en la provincial más austral fueron el 16 de junio.
Debido a ello, Bertone, electa diputada nacional el 27 de octubre, decidió renunciar a la gobernación con fecha 9 de diciembre, para poder estar presente un día después en la asunción del presidente Alberto Fernández, con quien tiene una buena relación.
Ayer la gobernadora envío una nota al vicegobernador Juan Carlos Arcando en la que le señala que dejará el cargo el 9 de diciembre para iniciar su gestión como diputada, por lo cual será ese funcionario el que entregará los atributos a o Melella -quien ganó en primera vuelta por más del 50% de los votos- en el acto del 17 de diciembre en Ushuaia.
“La situación del país y los desafíos que deberá afrontar de inmediato el nuevo presidente, Alberto Fernández, necesitarán del apoyo en el Congreso Nacional de los legisladores electos junto con él el pasado 27 de octubre”, indica a la nota de Bertone.
Apunta que “durante estos 4 años he tenido el alto honor de presidir el Poder Ejecutivo Provincial por elección democrática del pueblo fueguino, y he puesto el mayor esfuerzo junto con mi equipo de trabajo para ordenar el Estado, lograr la paz social en nuestra sociedad, y comenzar a construir la infraestructura necesaria para el desarrollo económico de la provincia”.
Bertone presentó la renuncia luego de que intentase vanamente concretar una transición institucional con Melella, quien la acusa de haber agitado y ventilado falsas situaciones personales de abuso sexual contra obreros a cambio de trabajo, especialmente en los medios masivos porteños.
La gobernador le envió desde el 16 de junio tres cartas a Melella pidiéndole una transición, pero las misivas no tuvieron respuesta, por «cuestiones de agenda».
El gobernador entrante, a su vez, contraatacó con una nota en la que acusa de Bertone de haber abandonado la gestión para hacer campaña por su diputación, y le exige que “imparta las directivas a los fines de entregar la documentación e información solicitada» a su equipo, especialmente sobre temas de “obra pública, salud, educación y contrataciones”.