La pandemia del coronavirus acecha y los preparativos de los ministerios de Salud de la Nación, la Ciudad de Buenos Aires y el gobierno bonaerense son denodados y minuto a minuto. El plan gubernamental -al que accedió en exclusiva Periodismo Federal– ya está pergeñado y todos trabajan para alistar al menos unas 21 mil camas en plena crisis entre enfermos «intensivos» -los más graves-, «generales» y «leves», en la zona del Amba, que congrega a casi 15 millones de pobladores.
En paralelo, las áreas de Economía, Desarrollo Productivo y Desarrollo Social preparan un plan de contención alimentaria, a través de la Tarjeta alimentaria, y por medio de entrega directa de bolsas con alimentos por medio de las intendencias y los movimientos sociales.
De acuerdo a los cálculos oficiales, el 81 % podría sufrir casos «leves», un 14%,»severos» y solo un 5 %, «críticos», es decir los de extrema gravedad y, que, por ejemplo, podrían requerir auxilio de respiradores artificiales e internación de casi un mes.
De los 15 millones de pobladores, unos 8 millones tiene cobertura de la salud pública, según las estadísticas del COE, el Comité de crisis del coronavirus.
El AMBA incluye a la ciudad de Buenos y el conurbano bonaerense, donde se concentra casi un tercio de la población del país, y es el epicentro actualmente del avance del conavirus en el país y se teme que a medida que se propague afecte con más crudeza los bolsones de pobreza del conurbano.
En la ciudad de Buenos Aires, la meta del COE es de 400 pacientes (con un pronóstico de 15 días de alojamiento en el hospital en Internación general y 150 de cuidado intensivo (en este caso podrían ser entre 25 y 30 los días de internación), o sea los casos más graves, mientras que para los casos leves hay previstas 2.000 camas, donde se estiman que los pacientes podrían estar solo 5 días.
En el conurbano, en tanto, las previsiones sanitarias son de 1.050 camas los casos «intensivos», de 400 para los «generales» y de 14.000 camas los «leves».
Los pacientes «leves» de ambos distritos no serán llevados a hospitales, sino que tienen que estar aislados de sus entornos familiares por lo que está previsto trasladarlos a hoteles o clubes o centros comunitarios especialmente habilitados y acondicionados para la emergencia sanitaria.