Organismos públicos e integrantes de las familias residentes en la localidad chubutense de Cushamen acordaron conformar un comité de crisis para implementar medidas de control efectivas y de consenso contra la langosta, en un encuentro del que partciparon vecinos y representantes del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), de los institutos nacionales de Asuntos Indígenas (INAI), de Tecnología Agropecuaria (INTA), del gobierno de Chubut, de la Corporación de Fomento provincial y de la Jefatura Comunal de Cushamen.
La presencia de langostas es una de las problemáticas que hoy afecta a sus campos.
“En esta región hay 17 comunidades de pueblos originarios que desarrollan actividades agrarias y la presencia de la plaga les produce perjuicios no solo desde lo productivo, sino también en su vida cotidiana”, dijo Esteban Rial, coordinador de Protección Vegetal del Centro Regional Patagonia del Senasa.
Rial confió que “hay una presencia muy importante de este insecto que no solo se alimenta de las pasturas destinadas a las majadas o rodeos, sino que se mete en las casas de los pobladores o mueren en los pozos de agua”.
“Repasamos las acciones sanitarias interinstitucionales que venimos realizando en los campos, compartimos las estrategias de intervención que se tomaron y escuchamos las demandas de las personas asistentes”, subrayó Rial.
Rial agregó que el encuentro “permitió repasar las acciones técnicas correctas para el control de la langosta, tales como la aplicación de productos fitosanitarios tendientes a frenar la presencia de la plaga en esta región patagónica”.