A un mes del recambio de gobierno en Santa Fe, el gobernador saliente Miguel Lifschtz reunió a su gabinete y les pidió bajar un cambio en la tensa transición que se viene dando con el mandatario entrante, Omar Perotti. Les pidió que ya no haya más licitaciones y, también, desacelerar el ritmo de la obra pública de modo de facilitarle la tarea a la próxima gestión peronista.
“Ratifico, lo he dicho varias veces y se lo he dicho al propio Omar Perotti, con quien tengo una relación de respeto y aprecio desde hace muchos años, nosotros vamos a colaborar con el gobierno entrante de aquí al 11 de diciembre y después de esa fecha desde la Legislatura”, aseveró Lifschitz.
En ese plano, aseguró que “si al primer año de gestión de Perotti le va bien también lo siento como una responsabilidad propia por colaborar y contribuir para eso”.
Por eso, Lifschitz, en conferencia de prensa tras reunir a su tropa, dejó claro que “la prioridad número uno son los sueldos, jubilaciones y pensiones con cláusula gatillo”, una preocupación latente no solo en el gobernador Perotti sino en las principales espadas peronistas de la Legislatura.
El mandatario socialista también remarcó que “la segunda prioridad son los servicios esenciales” y puso de relieve “fundamentalmente salud, la política social y alimentaria”
Según Lifschitz, “en todas estas áreas hemos reforzado las partidas para atender la mayor demanda y también la restricción de recursos por parte del gobierno nacional”.
El gobernador socialista también se refirió a uno de los puntos que produjo más chisporroteos entre ambos sectores, el de la confección del presupuesto 2020
El dirigente socialista, electo diputado provincial, explicó que había aceptado el pedido de Perotti de “postergar la presentación hasta después del 10 de diciembre, cuando asuma, pero aclaró que esa promesa fue “contraviniendo lo que dice la Constitución de la provincia” por lo que ante el pedido de la Cámara de Senadores y la de Diputados, lo envió a la Legislatura ”dentro de los plazos previstos”.
En ese punto, alzó la voz y afirmó que le había solicitado al gobernador entrante que envíe sus propuestas, “cosa que no ha ocurrido hasta el momento”.
“Estamos trabajando con la idea de hacer un presupuesto genérico más o menos en línea con los presupuestos anteriores que se someterá el debate legislativo de ambas Cámaras”, resumió Lifschitz, quien seguramente presidirá la Cámara de Diputados provincial y de ahí anticipó que fiscalizará la gestión Perotti.